100 Capítulos

"Mis amigos. Mis secretos. Mis sueños" llega al increíble número de 100 capítulos.

Se dice pronto.

Y aún no se sabe cuando acabará.

Quien iba a decirme a mi, cuando solo eran ideas en mi cabeza, que llegaría a escribir tantos capítulos o cuando comencé a subirla a algunas páginas de internet que duraría tanto.

Realmente no es algo que planee, yo solo quería escribir una historia, ni siquiera planeaba que nadie, salvo mis amigos mas cercanos, la leyera. Y durante más de un año así fue.

Ahora la leen un poquito más de personas, tampoco muchas, gente que ahora se han convertido en amigos míos. Y es que 100 capítulos son muchos y da para coger cariño a las personas.

Yo estoy contenta porque mi historia sigue siendo mía porque a veces te dejas llevar por el afán de agradar a quienes te leen y terminas cambiándola y deja de ser tuya, se queda como "adulterada". Pero como yo no tengo afán de popularidad ni nada de eso pues sigo fiel a mis ideas y eso es bueno.

No voy a decir que durante 99 capítulos no haya agradecido todos y cada uno de los comentarios recibidos, eso sería mentir, y además me han alegrado muchísimo. Me he sentido orgullosa de que mi historia entretuviese a alguien que se le ocurriese leerla, que mis personajes cayesen bien o mal, que llorasen o riesen leyéndola y me he sentido orgullosa de ser una cuenta-cuentos.

100 capítulos.

Durante 100 capítulos hemos ido conociendo a Akira y su paciencia infinita, a la cabezota enojona de Akane, a... bueno, muchísimos y los que aún aparecerán.

Todo comenzó cuando yo quería leer una obra de teatro, concretamente "El sueño de una noche de verano" pero empecé a divagar con personajes que interpretaran esos papeles y luego con que fueran amigos que tenían que hacer una representación y... terminaron formando parte de una clase y... bueno, empezaron a interactuar unos con otros y todo se complicó.

Tengo ante mi las primeras palabras que escribí ese día de Diciembre que, sin saber muy bien que hacer, cogí un folio usado y un lápiz y comencé a escribir, luego el principio cambió pero se puede decir que esta historia comenzó así:

"Akane soltó el lápiz que sostenía entre los dedos y se recostó en su asiento; decidió que era el momento para observar a sus compañeros. Echó un vistazo por el aula, como la profesora tardaba en venir, el ambiente era totalmente espontáneo"

Y así empezó todo. Con unos cuantos personajes que aún no estaban muy definidos del todo y algunos ni nombre tenían, en su defecto les llamaba con los nombres de personajes de anime en los cuales me quería basar.

Solo me queda dar las gracias a todos los que han hecho posible que la historia llegue a los 100 y capítulos y continúe.

A Kumiko, que escuchaba los primeros borradores.

A Kiyo, que aunque para él debe ser una historia muy aburrida también los escuchaba y ha llegado a conocer a todos los personajes.

A Valentina, que se hizo una cuenta en Fanfic.es solo para poder comentarme y que ha escrito one-shots con mis personajes.

A AppleNinde, la primera persona que me puso un comentario y que ha seguido la historia desde el primer capítulo.

A Ale-chan, que primero leyó el spin-off y luego la encontró por casualidad y que me llenó de comentarios cariñosos y que aun la lee.

A Analy, que me ayudó en bastantes momentos, que tardó meses en decidirse a leerla pero que cuando lo hizo escribió una increíble recomendación en su blog.

A Kaoru96, que me comentó durante muchos capítulos, no se si aún seguirá leyendo o se habrá aburrido ya pero yo le agradezco mucho lo que hizo.

A PeteBurque, que llegó "a ver de que iba" después de leer la versión fanfic de la historia.

A Beiran, que hasta hizo unos dibujos de Akira y Akane.

A Grazara, la última persona, que yo sepa, que se leyó la historia en pocos días y que próximamente tendrá un regalo especial en uno de los capítulos.

A Clover, que está empezando y aún va por el principio.

A Mariposa86, LasLocurasdeLoly y Danariana, que de vez en cuando me hacen saber que continúan leyendo.

Y muchas más personas pero ahora no recuerdo a todos, pero es igual porque aunque solo leyeran un capítulo para mi ya se merecen un "gracias".

Las preguntas ahora son ¿Hasta que capítulo llegaré? ¿Seguiré teniendo lectores para entonces? Bueno, sea como sea la historia debe terminar porque si lo he empezado debo continuar.

100 capítulos, 100 semanas escribiendo con ilusión... también tengo que dar las gracias a todos "mis niños" que, introduciéndome en su mundo, me han ayudado a hacer algo que me gusta: contar historias. Ellos solo me han dado alegrías, es lo bueno de escribir.

Y espero seguir haciéndolo.